Desempleada, solterísima y con los salarios producto de recitar "Thank you for calling Bodog wagering, my name is Andrea, may I have your account number, please?" un promedio de 6048 veces, este es el relato de una mujer de 30 años, quien un buen día decidió iniciar un periodo dadaísta en su vida y subirse a un caballito de madera solo para balancearse un rato sin llegar a ninguna parte, bajo la filosofía de Charlie García: "La vida es disfrutar el paso del tiempo".

sábado, 26 de marzo de 2011

Nyon, 22 de marzo

(Extracto de la Pascualina)
Una semana justa en Francia/Suiza y hasta ahora me siento a escribir. Poniéndome al día con España me he tardado lo mío. Luego de Alicante, regresé a Madrid, y recorrí todos los lugares emblemáticos para recuperar las fotos que se me echaron a perder en la Ruta y las que Simmel nunca me dio: la puerta de Alcalá, el parque del Retiro, la Plaza Mayor... Me quedé con Miguel y su flamante esposa y luego a encontrarme con los Fernandos en Ginebra...
Después de tres viajes a Madrid, finalmente foto en la Puerta de Alcalá

Siguiente capítulo en el viaje dadaísta. Cambiamos de hoja, de capítulo y de fronteras.
Lo peor es que tengo la mano congelada de tomar agua en tantas fuentes, que aquí las hay por doquier, por lo visto a los suizos les gusta estar bien hidratados. He andado un poco más relax, viviendo la vida cotidiana de los Fers. Ahorita estoy esperando a que Fer Guate salga del gym.
Es medio surrealista esto. Enfrente mío, en una vitrina: cuatro máquinas elípticas. Un mae con una camiseta de I love NYC, una asiática y dos chicas que con suerte pueden ser suizas, porque aquí nadie es de aquí. Una semana en este país y solo una suiza he conocido.
Por lo pronto, a parte de internacional, Suiza es demasiado perfecto. Hasta los basureros son dignos de foto. El que dijo, en un arranque de inspiración demasiado hiperbólica y positivista, que Costa Rica es la Suiza centroamericana NUNCA ha de haber estado en Suiza. Es que NADA QUE VER.
Basureros suizos, Lausanne

Aquí me siento todo el tiempo dentro de un Lego y hasta el pelo se ha hecho más lacio, como para calzar con el prototipo. Ahorita de seguro me vuelvo amarilla y las manos se me hacen como una C.
Aunque no hemos salido mucho a turistear (la verdad he tomado esto como un oasis) no deja de ser dadaísta. La luna más cerca de la Tierra en mil años, y los Fers y yo fumándonos un cigarro en el balcón. El Fer España haciendo lagartijas, fumando como un loco y vomitando para faltar al trabajo. Música celta en un bar en Lausanne. Una tienda que se llama Anouk en medio de Nyon, para que Fer Guate se acuerde todos los días. Nosotros tres almorzando en un café de Ginebra con un mesero guapísimo. Comiendo sushi con una española eufórica y una sueca piloto. El Fer Guate estudiando francés en la cocina y yo con el otro viendo Amelie y suspirando por Mariano. Los Alpes desde el balcón. Un café en Francia con los perros más hermosos desfilando por la calle. Un consultorio atestado de gente, sin recepcionista, sólo 6 puertas cerradas. Y yo junto a la calefacción viendo a esta gente en vitrina sudar la gota gorda, mientras estoy bien echada en la banca escribiendo, fumadora empedernida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario